ACEITE DE MACADAMIA Suaviza y protege la piel del sol y de los agentes externos.
El aceite de macadamia es un aceite rico en ácidos oleico, ácidos grasos insaturados, palmitoleico linoleico y linolénico. Protege la piel del sol y del viento manteniendo su hidratación, suavidad y sedosidad. Es un aceite ligero y emoliente indicado para pieles apagadas.
ACEITE DE ONAGRA Favorece la hidratación, la elasticidad y previene el envejecimiento de la piel. Trata dermatitis y sequedad de la pie.
El aceite de Onagra es rico en ácidos grasos esenciales poliinsaturados: ácido linoleico y ácido gamma-linolénico, tiene propiedades antiinflamatorias, calmantes y regeneradoras en la piel y está recomendada para tratar eccemas, irritación, picazón y sequedad. Indicada para tratar dermatitis atópica, piel seca, escamosa y reacciones alérgicas de la piel.
ACETATO DE TOCOFEROL Aporta humedad extra a la dermis y ayuda a reducir las ojeras y las manchas de la piel.
Posee Propiedades lipofílicas, antiinflamatorias y de protección de factor solar. Además proporciona un aporte extra de humedad a la dermis, humectando la piel seca y siendo ideal para pieles sensibles. Hidrata la piel sin engrasar y ayudar a retener la humedad. Asimismo reduce las machas en la piel y las ojeras por su función antiinflamatoria.
ACEITE DE LAVANDA Aporta propiedades antisépticas, cicatrizantes, reparadoras y antioxiodantes a la piel.
Este aceite natural tiene funciones analgésicas, antisépticas, antioxidantes, calmantes, antibacterianas, cicatrizantes, analgésicas y reparadoras. Está indicado para tratar heridas, acné y manchas, piel rosácea y psoriasis. Ayuda a tonificar y aumentar la elasticidad de la piel. Ideal para pieles sensibles y para pieles cansadas. Regula el sebo y libera del estrés.
ACEITE DE LIMONCILLO Reafirma y tonifica la piel. Reduce los poros y unifica el rostro. Combate las bacterias y el acné
Sus propiedades desintoxicantes, astringentes y purificantes, fortalecen los vasos sanguíneos y estimulan el flujo linfático. Por sus propiedades antioxidantes y antisépticas combate las bacterias y es perfecto para combatir el acné, reafirmar, tonificar la piel y estimular la circulación, así como para reducir los poros y obtener un rostro más uniforme.
FLOR DE CALÉNDULA Ayuda a eliminar marcas del rostro. Es antioxidante y antiinflamatoria reduciendo lineas de expresión y ojeras.
Tiene propiedades antiinflamatorias, antioxidantes, calmantes y curativas gracias a sus carotenoides, además posee propiedades antimicrobianas y es cicatrizante a la vez que trata la piel inflamada y con eccemas. Indicada para tratar el acné, la piel seca y agrietada.
ROMERO Tiene acción tonificante favoreciendo la elasticidad y firmeza de la piel.
Su aceite esencial tiene propiedades tonificantes y estimulantes elimina impurezas y cicatriza la piel dañada. Favorece la elasticidad y la firmeza y es usado a su vez para tratar acné y eccemas
LLANTÉN Ayuda reducir marcas y cicatrices.
Tiene propiedades emolientes, cicatrizantes y acelera la coagulación de la sangre, calma irritaciones y es astringente y antiinflamatoria, ideal para cicatrices y marcas de acné.
CENTELLA ASIÁTICA Estimula la producción de colágeno y repara y regenera la piel.
Tiene propiedades cicatrizantes, regeneradoras, reparadoras y renovadoras sobre la piel, asimismo estimula la activación fibroblástica y la producción de colágeno.
SEMILLA DE TÉ VERDE Gran poder antienvejecimiento, hidrata, da firmeza y suaviza la piel.
La semilla de té verde tiene grandes propiedades antioxidantes y antienvejecimiento además de que previene del daño solar combatiendo los radicales libres con una gran acción nutritiva en el rostro. Entre sus beneficios destaca su acción colagenasa que hidrata, da firmeza y suaviza la piel.